La escuadra nacional arribó a la capital el pasado 14 de octubre, luego de un viaje desde Concepción que tuvo como objetivo conocer y entrenar sobre el frontón que albergará el campeonato mundialista. A un mes de la competencia, los jugadores sitúan sus expectativas de cara a la próxima cita planetaria. Medallas, podio y Barcelona 2018 asoman en sus horizontes.

“¡Dale, dale! ¡Hay que llegar!”. Los gritos se escuchan fuerte sobre el frontón del Estadio Español. A un costado de la cancha, con raqueta negra en su mano, el técnico de la Selección Nacional de Frontenis, José Antonio Ciriza, alienta con entusiasmo a sus dirigidos.

Sobre el pavimento entrenan Natalia Bozzo, Fernanda Serrano y Magdalena Muñoz, integrantes del seleccionado femenino de la especialidad mencionada. Esta modalidad ha encontrado en Concepción, 500 kilómetros al sur de Santiago, la tierra más fértil para la cosecha de jugadores y el desarrollo de la competencia interna. Prueba de ello es que el combinado criollo, tanto femenino como masculino, está compuesto en su totalidad por pelotaris provenientes de la Octava Región.

La visita a la capital se enmarca dentro del plan preparativo para la Copa del Mundo de Frontón 30 metros, que se llevará a cabo entre el 21 y 26 de noviembre, en el Estadio Español y en el Eusko Etxea de Santiago.

“La preparación la empezamos en marzo, con entrenamientos físicos y técnicos. Además, desde hace dos meses, ya estamos entrenando todos los días para llegar lo mejor posible. Esta visita a Santiago es para conocer la cancha y jugar en ella, que son las pequeñas ventajas que te entrega la condición de local”, dice Natalia Bozzo.

Expectativas

A un mes de la Copa, la ilusión de los jugadores de Frontenis se mantiene intacta y más ávida que nunca. “Nuestro primer objetivo es clasificar al Mundial de Barcelona 2018 y a los Panamericanos de Lima 2019”, admite Bozzo. La misma jugadora añade que “creemos que estamos bien, que podemos lograr esas metas. Ganar una medalla sería ideal, pero sabemos que vienen seleccionados de otros países muy preparados y les vamos a dar pelea”.

La escuadra masculina fija sus expectativas con un entusiasmo similar. Ignacio Trucco, Jesús García, Osvaldo Ortiz y Julián González forman un grupo compenetrado. Bajo la atenta mirada de Ciriza estrenaron el próximo frontón mundialista con golpes duros y un entrenamiento de alta demanda física.

“Está quedando bueno. Fue positivo venir a practicar aquí”, dice González. Al igual que sus compañeras, Trucco admite que la preparación que han tenido para enfrentar la Copa ha sido muy importante para presentar un nivel acorde al compromiso. “Hemos trabajo arduo. Ya llevamos un año entrenando y creo que llegamos bien. Nos hemos preparado por harto tiempo porque la situación lo amerita. Nuestro técnico y preparador físico lo han hecho muy bien exigiéndonos al máximo”, finaliza.

En cuanto a los objetivos fijados, García afirma que “nuestra meta principal es clasificar al Mundial del 2018 y Panamericanos 2019”, igual que el seleccionado femenino. “En comparación con los demás países creo que estamos bien preparados, llegamos con un buen nivel. Vamos por una medalla y el podio. Tenemos que aprovechar esta opción que nos han dado de organizar una Copa del Mundo”, añade Ortiz.

En este sentido, el jugador espera que “este campeonato se aproveche como una oportunidad para masificar el deporte, aumentar la masa que lo practica. Tenemos frente a nosotros una cita mundial que lo ideal es que impacte positivamente en la pelota vasca y cómo se vive en el país”.